Por Prof. Luis Miravalles Consultor en formación profesional |
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Esta nota está dedicada a encargados de edificios, inquilinos, propietarios, administradores e instaladores. Resolveremos algunas preguntas que suelen formular los encargados de edificios y la respuesta que debería dar un electricista instalador. Es necesario hacer antes algunas aclaraciones: cuando en el habla corriente se dice “disyuntor”, correspondería decir “interruptor diferencial”, y cuando se dice “abajo”, se habla de la palanca de dicho interruptor en posición intermedia o inferior, de la planta baja en el exterior o el interior del edificio, o bien del sótano, o de dos o más de las condiciones antes mencionadas.
Figura 1. Traba candadoEl “disyuntor”, ¿va arriba o va abajo?Los interruptores diferenciales van tanto abajo como arriba, porque si estuviesen solo en el tablero principal (el de “abajo”) habría siempre que descender para reponerlo, en caso de avería, de aislamiento o contacto accidental dentro del departamento. Que el interruptor diferencial esté solo abajo implica imposibilidad de prueba periódica obligatoria, única forma de saber si el dispositivo sigue siendo efectivo. Yo pregunto, ¿por qué en varios edificios solo hay “disyuntores” abajo?¡Mal hecho! Porque reglamentariamente tiene que haber interruptores diferenciales tanto en el tablero principal como en el seccional.
Figura 2. Tarjeta de advertenciaAlgunas aclaraciones...Dicho esto, por un lado, aclaramos que la reposición de un disyuntor, sea este diferencial o una termomagnética (pequeño interruptor automático, PIA) no es “moco de pavo”.
Damos, a continuación, algunos otros indicadores visibles del estado de dispositivos de corte y protección existentes y sus correspondientes equivalencias (nótese el antagonismo posicional entre “On” y “Off” y la ambigüedad conceptual entre “On” y “No”). Conectado = Adentro = I = Sí = On
Figura 3. Batería de medidores tras la reja Por otro lado, aclaramos, entonces, que no basta que el interruptor diferencial del tablero principal tenga una sensibilidad asignada mayor que la del interruptor diferencial del tablero seccional, por ejemplo, cien o trescientos miliampers (100 o 300 mA) en el tablero principal si tuviésemos treinta (30 mA) en el seccional; o treinta, cien o trescientos miliampers (30, 100 o 300 mA) en el principal, si tenemos diez (10 mA) en el seccional; porque si la corriente de avería en algún punto interior del domicilio del propietario o inquilino fuese suficientemente elevada, podrían disparar ambos a la vez o solo uno de ellos y, en caso de que este último fuese el del tablero principal, no se sabría si la avería provino del interior del departamento o si tuvo lugar en la línea que vincula el tablero principal (el “de abajo”, en la batería de medidores) con el TG (el de la cocina del departamento). Procede entonces, reglamentariamente, que el interruptor diferencial del tablero principal sea del tipo “selectivo”, es decir, que su disparo sea diferido con respecto al disparo del interruptor diferencial del tablero seccional (selectividad cronométrica). |
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Prof. Luis Miravalles |