Destacamos la figura de Serafín Mendizábal, quien a los 78 años recibió el título de ingeniero electricista. El flamante profesional retomó la carrera universitaria cuarenta años después de que el golpe militar lo llevara a abandonarla.
Serafín Mendizábal tiene 78 años y es de Villa María (Córdoba). En junio de 1976 debió dejar la facultad por el golpe militar, pero cuarenta años después se recibió de ingeniero electrónico en la Universidad Tecnológica Nacional de Tucumán, donde vive en la actualidad.
En un reportaje realizado en el programa “Desde el Conocimiento”, emitido por C5N, comentó: “Estoy disfrutando de este momento de recibir el título de Ingeniero Electricista. A esta edad, porque tuve que dejar de estudiar en el año 76”.
En un reportaje realizado en el programa “Desde el Conocimiento”, emitido por C5N, comentó: “Estoy disfrutando de este momento de recibir el título de Ingeniero Electricista. A esta edad, porque tuve que dejar de estudiar en el año 76”.
“Estoy disfrutando de este momento de recibir el título de Ingeniero Electricista. A esta edad, porque tuve que dejar de estudiar en el año 76”.
El flamante ingeniero agregó: “De la tortura física uno se podría dar cuenta, pero de la psíquica me di cuenta en el año 2003. A finales de 2003, cuando una amiga de mi hija me pidió que la ayudara a hacer un trabajo práctico sobre cómo fue el gobierno de la Dictadura Militar, cuando estaba todo listo para grabar, recordando ese pasado me quebré y me puse a llorar. Me acuerdo, mucho dolor. Después se hizo un estudio psicológico y me dijeron que tendría que volver a la facultad, ya que era la única manera en que podía superar al drama”, contó.
“¿Cómo te sentís ahora?”, le preguntaron en la entrevista, y contestó: “Me siento como todo aquel que quiere lograr algo difícil, que cuando llega, cuando lo logra, siente un dulce sabor a gloria, pero mezclado también con las pérdidas de los amigos que cayeron en esa época, que hicieron tanto por la facultad y que hoy ya no están con uno físicamente”.
“¿Cómo te sentís ahora?”, le preguntaron en la entrevista, y contestó: “Me siento como todo aquel que quiere lograr algo difícil, que cuando llega, cuando lo logra, siente un dulce sabor a gloria, pero mezclado también con las pérdidas de los amigos que cayeron en esa época, que hicieron tanto por la facultad y que hoy ya no están con uno físicamente”.
“Lo mío, esta situación del título que acabo de recibir, no hay que tomarlo como una cosa individual, como si fuera ejemplo de la meritocracia (...)”
¿Qué representa este título ahora? Serafín también contestó esa pregunta: “Lo mío, esta situación del título que acabo de recibir, no hay que tomarlo como una cosa individual, como si fuera ejemplo de la meritocracia. Yo he nacido con la misma cantidad de neuronas como nace cualquiera (rubio, blanco, moreno), pero el problema está en que no ha sido una hazaña particular. Yo me he podido recibir porque se creó la Universidad Obrera en el primer gobierno de Perón, porque hubo un avance muy espectacular de la industria liviana y pesada y la necesidad de que haya ingenieros ha sido la fuerza que empezó la creación de la Universidad Obrera, que después se convirtió en Tecnológica”.
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